El día a día de una cabeza abstracta

viernes, 14 de septiembre de 2007

Descubriendo el pasado






Algo que el tiempo borra, que entierra en silencios desacompasados.


Una soledad sonora, viviente, palpitante.


Resultado de lágrimas amargas y desesperación divina.






Una bella ventana hoy está abierta.